El sector de la automoción, como tantos otros, se ha visto muy afectado por culpa de la pandemia mundial que estamos viviendo. Se ha hablado mucho de como ha afectado a nivel de cifras, así como del enfoque que le hemos de dar a esta situación para tratar de revertirla lo antes posible.
En este articulo nos vamos a centrar en analizar como la COVID 19 ha afectado al comportamiento del consumidor en cuanto a la intención de compra de vehículos.
Hay que tener en cuenta los factores en los que ha influido la pandemia a nivel de rutinas y comportamiento de la sociedad en general.
Una de las cosas que se ha implementado a lo largo de este año y que seguramente ha venido para quedarse (en la gran mayoría de los casos), ha sido la aplicación del teletrabajo en las empresas.
Esto implica que la movilidad intersemanal se ha visto reducida considerablemente. Por lo que, una gran cantidad de usuarios usará solo su vehículo el fin de semana y, de forma puntual, de lunes a viernes.
Además, se da el caso de que muchas familias tienen varios vehículos. Teniendo en cuenta esta situación, se quedarán solo con uno compartido; ya que únicamente harán trayectos puntuales y se moverán conjuntamente en días festivos/no laborables.
Otro efecto que ha provocado la pandemia, y que es totalmente opuesto a la anterior, a nivel de perspectiva de negocio para la automoción, es la reticencia a estar en lugares cerrados con grandes aglomeraciones de personas. Esto repercutirá en el uso del transporte público, ya que se verá reducido, y la necesidad de moverse con un transporte particular se verá incrementada.
Obviamente, el principal factor y seguramente el más generalizado es el económico. Dada la crisis financiera y la difícil situación que está viviendo gran parte de la sociedad, seguramente el hecho de comprar un vehículo no será una preferencia. Por lo que se pospondrá la decisión de compra para más adelante, cuando la situación mejore. Y ya no solo hay que tener en cuenta esto. También habrá una gran parte de clientes que se encuentran en medio de una financiación y que pedirán aplazar los pagos o pedir una ampliación para mejorar las condiciones de dicha financiación.
En línea con lo que venimos comentando, hay muchas empresas y particulares que prefieren no hacer un gran esfuerzo económico en este momento. Aún así quieren renovar su vehículo o flota, por lo que buscarán alternativas.
La principal alternativa es el Renting. El hecho de pagar una cuota mensual fija y no tener que hacer una inversión inicial, hace que sea una apuesta muy recurrente hoy en día. Además, no solo se busca el ahorro en dicha inversión inicial, sino la tranquilidad de no tener que hacer un esfuerzo económico extra en lo que a mantenimiento y reparaciones se refiere.
En conclusión, pese a que estamos en un momento difícil en todos los sentidos, el sector de la automoción sigue muy vivo y buscando siempre alternativas y recursos para generar negocio y facilitar las cosas al eje fundamental de este sector: los clientes.